Les traigo el secreto más valioso para obtener un maquillaje increíble. No es la base, no son los polvos, ni el mejor labial… es la preparación de la piel.
Sabemos que un buen makeup
lleva varios pasos y, aunque podemos reemplazar muchos productos de acuerdo a
nuestras ganas y a la época del año, de lo que no nos podemos olvidar jamás es
la limpieza e hidratación de nuestra piel.
Cuánto mejor hidratada esté nuestra piel, mejor nos va a quedar la
textura del maquillaje que apliquemos y más tiempo nos va a durar. Si te estás
aplicando una base y a las pocas horas sentís que te estás desmaquillando ¡ALERTA!
Seguramente falte hidratación. Entonces, ¿qué hacemos?
Paso 1: limpieza
Nuestro rostro debe estar libre de impurezas para avanzar a los
siguientes pasos.
Si estás a «cara lavada», masajeás en tu rostro la leche
de limpieza intensa de Derma Beauté en rostro, cuello y escote entre unos
15 o 20 segundos, la retirás con un algodón o tu pad reutilizable y luego enjuagás con agua a temperatura ambiente.
¡Ojo cuando te seques! No arrastres la toalla ni generes mucha fricción.
Si ya estabas maquillada, pero querés hacer un cambio, podés usar el Desmaquillant,
lo pasás por el rostro con un algodón empezando por las zonas de más makeup
como ojos y labios, y luego continuás al resto del rostro.
Obviamente enjuagamos con agua al terminar.
Paso 2: hidratación
Cada piel es diferente y necesita productos diferentes, así que
siempre acudí a un/a profesional para asegurarte de usar lo adecuado para ti. En
caso de una rutina completa y casi ideal para todo tipo de piel, te recomiendo:
– Tónico o Bruma descongestiva: este paso es súper importante para
calmar la piel y equilibrar nuestro Ph. (La bruma
de aloe vera y manzanilla de Derma Beauté lo es TODO. Apta para todas las
pieles, sobre todo las que tienen rojeces).
– Vitamina C: antioxidante que no puede faltar, pero cuidado que no todas son
aptas para uso de día. (El Vital C
pueden usarlo de día y genera un efecto de rellenado de poros, lo amamos ¿no?)
– Contorno de ojos: si bien puede variar su uso de acuerdo a la edad,
recordemos que es la zona de la piel más fina de todo el cuerpo y debemos
cuidarla muchísimo, principalmente si luego quiero cubrir bien mis ojeras en el
makeup.
– Sérum: de acuerdo a tu piel podés buscar activos para complementar, pero no
son obligatorios en el maquillaje.
– Hidratante: finalizamos la rutina con nuestra crema de día y la dejamos
actuar unos minutos antes de aplicar la base.
Bonus para pieles mixtas o
grasas: aplicando el Rejuvié
Emulsión en lugar del sérum vas a poder controlar muchísimo mejor la
oleosidad de tu piel para que el maquillaje te dure mucho más tiempo.
Paso 3: MAQUILLAJE
Hay opciones para todos los gustos, con base, sin base, con rubor,
con bronzer, con labial, con pestañas. Lo importante es que siempre te sientas
cómoda y que priorices la salud de tu piel a la hora de seleccionar tus
productos.
Innovar, jugar y divertirte. Qué el maquillaje no sea para ocultarte, sino que
resalte tus mejores rasgos.
Si es de día, ¡no te olvides
de aplicar tu protector solar luego de la hidratación y antes del maquillaje!
Paso 4: DESMAQUILLARNOS
Ya les conté cómo usar los productos en el paso de limpieza, pero al momento de sacarnos
el makeup para irnos a dormir…la cosa cambia. Hacemos los dos pasos, sí, los
dos.
Primero sacamos el maquillaje con la crema desmaquillante (o pueden optar por
un agua micelar por ejemplo, o un aceite) y luego aplicamos la leche de
limpieza.
Esta doble limpieza hará que arrasemos con todo lo que no debe quedar a la piel para irnos a la cama y va a estar mejor preparada para hacer nuestra rutina de hidratación de noche.
Keila Rodríguez
@kr_makeup